La mujer barbuda


Érase una mujer a barba anclada,

érase una perilla masculina,

érase barba contumaz, rabina,

érase perra pachón muy barbada.

 

Era hierba en barbilla mal plantada,

érase como lija aguamarina,

érase un rallador en la cocina,

era atracción de circo mal pagada.

 

Érase una ración de púas de peine,

érase una alfombrilla para el suelo,

era en los tenis pelos del empeine.

 

Érase una barbuda sin consuelo,

un sequeral donde el rastrojo reine

más que en las mismas barbas de su abuelo.

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.